Este caso refleja las consecuencias de una inadecuada técnica quirúrgica en una intervención de ligamentoplastia y la importancia de actuar legalmente ante una atención sanitaria deficiente.
Nuestro cliente fue intervenido quirúrgicamente en el Hospital del Sureste para una ligamentoplastia de rodilla. Desde el inicio del postoperatorio, el paciente presentó una evolución anormal: inflamación, rigidez articular y ausencia total de mejoría funcional. Estas complicaciones fueron incluso recogidas por los especialistas en rehabilitación.
Sin embargo, desde el Servicio de Traumatología se insistía en que la evolución era la esperada, ignorando tanto las pruebas clínicas como la sintomatología del paciente, que evidenciaban lo contrario.
Ante la falta de respuestas y la persistencia de los síntomas, el paciente decidió consultar en la sanidad privada. Fue allí, en una clínica especializada en traumatología, donde se confirmó que la plastia colocada durante la primera cirugía no estaba bien posicionada, lo que explicaba completamente las secuelas que sufría.
La única solución viable era someterse a una nueva intervención quirúrgica reparadora, lo que implicaba más tiempo de recuperación, dolor, costes adicionales y riesgo quirúrgico innecesario.
Ante esta situación, nuestra letrada Isabel Bonilla presentó una demanda contenciosa contra el Servicio Madrileño de Salud, responsabilizando al Hospital del Sureste por la deficiente asistencia médica y el error en la técnica quirúrgica.
El Tribunal Superior de Justicia dio la razón al paciente, reconociendo la mala praxis y condenando tanto al Servicio de Salud como a su aseguradora a indemnizar al afectado en concepto de daños y perjuicios.
Comentario
Este caso evidencia cómo una incorrecta ejecución quirúrgica puede derivar en secuelas permanentes y en la necesidad de someter al paciente a nuevos procedimientos. También resalta la importancia de acudir a profesionales con experiencia en derecho sanitario, como los abogados de Bley, que pueden garantizar justicia frente a errores que nunca deberían haber ocurrido.
