Una paciente acudió al Hospital Virgen de Toledo para dar a luz a su primer hijo. Ante la imposibilidad de un parto natural, se le practicó una cesárea que permitió el nacimiento del bebé sin complicaciones inmediatas. Sin embargo, durante la intervención quirúrgica, se cometió un grave error: se olvidó retirar todo el material quirúrgico.
En el informe de la cirugía constaba erróneamente un “contaje correcto según enfermería”, y la paciente fue dada de alta. Poco después, comenzó a experimentar dolores abdominales persistentes, que se agravaron con el paso del tiempo. Meses más tarde, tras diversas consultas médicas, una radiografía abdominal reveló la presencia de una gasa olvidada durante la cesárea.
La paciente fue sometida a una cirugía de urgencia para extraer el cuerpo extraño. Aunque la operación fue exitosa, sufrió lesiones temporales y secuelas físicas, estéticas y psicológicas que afectaron significativamente su calidad de vida.
Acción legal y resolución
Nuestra abogada presentó una Reclamación Patrimonial contra el Servicio de Salud de Castilla La Mancha, fundamentada en la Estrategia de Seguridad del Paciente que exige el cumplimiento del Listado de Verificación Quirúrgica (LVQ), una medida que fue incumplida de forma evidente.
Tras un procedimiento de año y medio, el Servicio de Salud de Castilla La Mancha reconoció el error y aprobó una indemnización de 34.575,57 €, destinada a compensar las lesiones temporales y las secuelas ocasionadas.
Lecciones importantes de este caso
Este caso resalta la importancia de implementar y seguir estrictamente los protocolos quirúrgicos para garantizar la seguridad de los pacientes. También demuestra que, ante situaciones de negligencia médica, es posible obtener justicia y reconocimiento con el respaldo de un equipo legal especializado.
Si tú o un ser querido habéis vivido una situación similar, no dudes en buscar asesoramiento legal para defender tus derechos.