Este caso refleja de forma clara cómo la falta de vigilancia en un centro asistencial puede tener consecuencias trágicas para los residentes y sus familias.
Una mujer de edad avanzada, con patologías previas, ingresó en una residencia de mayores buscando cuidados especializados y un entorno seguro. Sin embargo, durante su estancia, sufrió una caída en las escaleras del centro, que le ocasionó un traumatismo craneoencefálico con resultado de fallecimiento pocos días después.
Sus familiares, devastados, decidieron reclamar judicialmente contra la residencia y su aseguradora, alegando que no se había proporcionado la debida supervisión. La letrada Isabel Bonilla presentó una demanda fundamentada en la falta de cuidado y control por parte del personal de la residencia, lo que desencadenó el trágico desenlace.
Durante el juicio, se aportaron pruebas documentales, testificales, informes periciales y grabaciones en las que se apreciaban las circunstancias de la caída. Estas evidencias demostraron que, pese a los protocolos internos, la paciente subió sola las escaleras sin recibir la asistencia necesaria, lo que ocasionó la caída mortal.
El tribunal fue contundente al señalar que, aunque la gestión de un centro asistencial no sea una actividad peligrosa en sí misma, sí exige extremar las precauciones según las condiciones médicas y personales de cada residente. De hecho, las propias auxiliares reconocieron que la paciente necesitaba ayuda para desplazarse, confirmando la responsabilidad civil de la residencia.
Finalmente, el Juzgado de Primera Instancia de Navalcarnero dictó una sentencia íntegramente estimatoria, condenando solidariamente a la residencia y a su aseguradora al pago de una indemnización de 120.930 € a favor de los familiares.
Este caso marca un precedente importante: los centros de mayores deben adaptar sus protocolos a las necesidades de cada residente, garantizando su seguridad y bienestar. La omisión de este deber no solo genera un daño irreparable, sino que también conlleva responsabilidad legal y económica.
Seguimos comprometidos con la defensa de los derechos de las familias frente a situaciones de negligencia en residencias de mayores, acompañándolas en todo el proceso para obtener la justicia y compensación que merecen.

