Este caso pone en evidencia los graves riesgos asociados a un diagnóstico tardío en un cáncer de mama. Una paciente acudió a un ginecólogo de una clínica privada andaluza tras notar un bulto en el pecho. A pesar de que las ecografías mostraban un crecimiento progresivo de la lesión mamaria, el especialista no realizó una punción para descartar la posibilidad de un tumor maligno.
En su lugar, aseguró erróneamente a la paciente que se trataba de un fibroadenoma.
El diagnóstico de cáncer de mama llegó dieciséis meses después, cuando la enfermedad ya se encontraba en estadio IV, con metástasis óseas y un pronóstico desfavorable. Según los expertos, un diagnóstico oportuno habría permitido extirpar el tumor mediante una cirugía localizada, ofreciendo a la paciente un pronóstico mucho más esperanzador.
Acción legal y resolución
Tras un análisis detallado del caso con el apoyo de un perito oncólogo, se confirmó que la actuación del ginecólogo constituyó una negligencia médica por retraso en el diagnóstico. Nuestra abogada presentó la demanda correspondiente contra la aseguradora del ginecólogo.
Durante el proceso, se logró alcanzar un acuerdo extrajudicial que indemnizó a la paciente por la pérdida de oportunidad médica y las consecuencias de este retraso.
Gracias a la negociación eficiente y especializada, no fue necesario llegar a juicio. En menos de un año y medio, la afectada recibió su compensación.
Reflexión final
Este caso destaca la importancia de una atención médica responsable y oportuna, especialmente en enfermedades como el cáncer de mama, donde el tiempo es crucial. También subraya el valor de contar con un equipo legal especializado que defienda los derechos de las víctimas de negligencias médicas.
Si tú o un ser querido han sufrido una situación similar, no dudes en buscar ayuda legal para hacer valer tus derechos y recibir justicia.