Este caso refleja cómo un diagnóstico erróneo y una atención médica deficiente pueden cambiar radicalmente la vida de una persona.
Un paciente de 55 años acudió a un centro hospitalario de Málaga por una cefalea persistente durante más de dos semanas. A pesar de realizarle varias pruebas diagnósticas, como una resonancia magnética craneal y cervical, no se identificó la trombosis de senos venosos cerebrales que realmente padecía. En lugar de un diagnóstico certero, el paciente fue dado de alta con una simple prescripción de analgésicos.
La falta de detección oportuna fue un error grave. No identificar la trombosis cerebral supuso una omisión médica crítica, agravando el cuadro clínico del paciente. Horas después, con síntomas neurológicos más evidentes, regresó a urgencias, donde un nuevo TAC craneal confirmó la patología que debió haberse diagnosticado en su primera visita.
Ante la gravedad del diagnóstico ya avanzado, fue ingresado de urgencia en la Unidad de Cuidados Intensivos, iniciando un tratamiento intensivo y una vigilancia neurológica constante.
Las consecuencias de este error fueron devastadoras. El paciente sufre secuelas físicas y neurológicas persistentes, con cefaleas, vértigos y dificultades que impactan todas las áreas de su vida diaria. Además, su estado mental se ha visto afectado, precisando apoyo psicológico y tratamiento farmacológico, sin lograr una recuperación completa.
La abogada Clara Lozano Gallego, tras analizar la historia clínica, inició diligencias preliminares para intentar un acuerdo extrajudicial. Ante la falta de respuesta, presentó una demanda sólida, respaldada por un informe pericial de un neurólogo especializado, que evidenció claramente la negligencia profesional.
Finalmente, el Juzgado de Primera Instancia de Madrid Nº26 dictó sentencia condenando al hospital y a su aseguradora al pago de una indemnización de 274.553,34 €, además de los intereses de demora y las costas judiciales, lo que elevó el importe total a 504.798,25 € destinado a compensar los daños y perjuicios sufridos por la paciente.
Este fallo judicial no solo reconoce una grave omisión médica, sino que también sirve como recordatorio de la importancia de un diagnóstico precoz y del papel que juegan los abogados especializados en garantizar justicia para las víctimas de negligencia médica.
En Bley Abogados seguimos comprometidos con la defensa de los derechos de los pacientes y la mejora de la atención sanitaria. Porque cada error médico tiene una historia humana detrás.